El cuerpo de la periodista Griselda Blanco fue hallado en su casa de la ciudad de Curuzú Cuatiá, en Corrientes, el sábado pasado por la tarde.
Aunque en un principio trascendió que se trataba de un suicidio, luego los investigadores confirmaron que presentaba golpes y había rastros de sangre en el piso; por lo que no descartan que haya sido torturada y asesinada.