Desde el Instituto Misionero de Agua y Saneamiento, a través de un comunicado, se expresó la preocupación por los hechos de vandalismo. Como consecuencia, perjudicó el normal suministro de agua potable en muchos barrios de Puerto Iguazú.
Al respecto, un hecho vandálico se registró el sábado pasado en la toma del río Paraná cuando robaron la embarcación utilizada para las tareas operativas en la balsa de captación. Mientras tanto, muchos habitantes de la ciudad permanecían sin agua potable.
En consecuencia, se afectó el mantenimiento que requieren las bombas y el servicio se vio condicionado debido al recalentamiento de las mismas que no pudieron ser intervenidas por la falta de un medio de transporte que traslade a los técnicos desde la zona costera. Posteriormente, se solicitó colaboración a Prefectura Naval Argentina para continuar los trabajos.