“Es desesperante, triste, porque mi hijo usa la moto para trabajar y está muy difícil para volver a comprar las cosas”, señaló Gloria Baez, madre de un damnificado por el robo de una moto en su domicilio ubicado en el barrio Villa Alta. En este caso, una Motomel Skua color blanca de 150 (c.c.).
Además, Gloria comentó que también robaron una moto a un vecino, empleado de una empresa de seguridad, quien es el inquilino en su propiedad.
“Mi hija vive en el frente, pudo ver todo y cuando salió ya estaban abajo donde había uno esperando en una moto. Eran tres hombres que se llevaron la moto”, explicó la vecina de Villa Alta. Y agregó: “Me enteré que en otros barrios también robaron motos”.
En ese sentido, junto a otras denuncias informadas a la producción de El Independiente Iguazú, los damnificados expresaron mucha preocupación por la ola de robos de motos, garrafas, zapatillas, perros de raza, herramientas y hasta las plantas en las veredas “para venderlas”.
En varios casos se formalizaron las denuncias en distintas seccionales policiales, y en varios casos aún no se concretaron esas denuncias.
“Me robaron varias veces, pero lo que más me sorprende es el robo de plantas que tenemos adentro y en la vereda”, comentó Raúl Saravia del barrio Villa Nueva. “A una vecina le robaron un hermoso perro labrador que pagó carísimo”, explicó.
“La semana pasada me robaron herramientas y una garrafa, lamentable”, dijo Raúl.
Por otro lado, en los barrios San Lucas y Belén algunas personas se comunicaron con la producción de El Independiente Iguazú para informar la preocupación de los vecinos que se están reuniendo para realizar acciones en conjunto, aunque los encuentros se concretan con pocas personas porque “no hay compromiso de todos”.
Lo explicó Sebastián Rodríguez: “Hay días que no nos enteramos de los robos, pero cuando empezamos hablar con los vecinos sale a la luz muchísimos hechos de robos en comercios y casas. Roban de todo, lo que encuentran, pero a veces el daño mayor es lo que rompen”, dijo Sebastián. “Nos estamos reuniendo pero todo se pincha porque no hay compromiso de todos, no hay unión”.
Otra de las zonas de constantes robos a la propiedad es en el barrio Libertad y zonas cercanas donde los habitantes se refieren a la cantidad de adolescentes que roban para comprar drogas.
“Acá de tardecita y noche se observa de todo y para todos los gustos. Los chicos roban para comprar droga y te roban de todo: plantas, calzados, garrafas, rejas, ropa, bicicletas, de todo”. Así lo detalló Lucía (nombre de fantasía para protección). “La dorga es protagonista, día a día. No podemos más y vienen las motos de noche y exigen a los chicos tener dinero para darle algo de droga”, dijo la mujer que reside en la zona cercana al puente del barrio Libertad.
