Los turistas y habitantes de Puerto Iguazú que disfrutaban la noche del fin de semana en los bares de la avenida Brasil se vieron sorprendidos cuando de repente hubo un amplio operativo donde se desarticuló una organización narco que operaba desde esa ciudad turística hasta Tierra del Fuego.
Durante los operativos desplegados entre la noche del sábado y la madrugada del domingo en Iguazú, once personas fueron detenidas por estar sospechadas de formar parte de la banda.
Según fuentes oficiales, el grupo criminal conocido como el Clan Brites tenía a sus cabecillas dentro de la Unidad Penal 11 de Roque Sáenz Peña, en la provincia de Chaco, dependiente del Servicio Penitenciario Federal (SPF), donde cumplían distintas condenas por delitos relacionados al narcotráfico.
“Integrantes de la Unidad de Investigaciones de Delitos Complejos y Procedimientos Judiciales Paso de los Libres, de GNA, bajo supervisión del Juzgado Federal de esa misma localidad correntina, fueron los que iniciaron las primeras investigaciones para seguir los pasos de la banda ante la sospecha de distintas actividades ilícitas detectadas en el último tiempo. Todo se inició cuando los pesquisas detectaron que una encomienda con panes de marihuana fue enviada desde Puerto Iguazú hacia La Rioja y a partir de ahí hubo un trabajo silencioso que permitió identificar sospechosos. A partir de esto se realizaron distintas intervenciones a líneas telefónicas de los implicados que permitieron obtener datos importantes para la causa”, menciona el informe enviado a la prensa.
“Así se llegó al dato de tres internos de la UP 11 implicados en la organización, entre ellos Juan “Pipa” Brites (30), que el año pasado fue condenado a seis años de cárcel por el envío de droga desde Iguazú a distintos puntos del país. Y mediante el rastreo de las distintas escuchas se pudo establecer que estaban por despachar una encomienda con marihuana a Tierra del Fuego. A raíz de esto, el juez federal de Paso de los Libres, Gustavo del Corazón de Jesús Fresneda, dispuso una entrega vigilada de la citada encomienda para intentar identificar a su receptor”, informaron las fuentes oficiales.
“Fue así que en Río Grande un hombre ligado a la banda intentó llevarse el paquete y automáticamente quedó tras las rejas. Luego de ese operativo, y en base a las investigaciones, se sospecha que la organización abrió un pub nocturno para seguir operando. Para ello crearon Club Native, el cual fue clausurado y que estaba en manos de un testaferro identificado como Diego (R), que también fue detenido”.